Goalball, el fútbol que juegan los ciegos

En Medellín, varios grupos de invidentes tienen sus propios equipos y lo practican en forma recreativa. Los elencos de los barrios Castilla, Campo Valdés y Popular disputaron un minitorneo una tarde lluviosa de jueves.



Texto y fotos Estefanía Giraldo Mejía
egiral11@hotmail.com

Un grupo de discapacitados visuales se reúne todos los martes y jueves a las tres de la tarde para jugar fútbol. Un fútbol no muy convencional, hay que aclarar.

Se llama goalball, un deporte relativamente nuevo en Colombia para personas con esta limitación física. Hace más de un año entrenan, desde marzo del año pasado lo practican en el parque Juanes de la Paz y sus jugadores ya han participado en campeonatos nacionales en diferentes ciudades del país.

Este deporte nació en Europa en 1946 para ayudar a la rehabilitación de los discapacitados visuales que dejó la Segunda Guerra Mundial.


Los partidos duran 20 minutos y se juega con un balón especial, el cual tiene cascabeles en su interior con el fin de que los jugadores desarrollen su capacidad auditiva y así poder acercarse a él.

Cada año se celebran los campeonatos mundiales de goalball en los Juegos Paralímpicos. Los últimos se realizaron en Beijing un mes después de los Olímpicos de 2008.


Apartes de la final de goalball en los Juegos Paralímpicos Beijing 2008, entre China y Lituania, en masculino.

El jueves 5 de noviembre de 2009 se encontraron, como de costumbre, a las tres de la tarde, con sus uniformes blancos, sus rodilleras, sus coderas y una venda para taparse los ojos aquellos que tengan algo de visión.

El juego empezó una hora tarde porque había que esperar a los árbitros que tardaron por culpa de la lluvia.

Para comenzar, la profesora y encargada, Blanca Cortez, quien también tiene discapacidad visual, marcó la cancha de juego con cintas con la ayuda de un joven que sí podía ver y luego leyó con algo de esfuerzo las instrucciones ya que su insuficiencia visual no es muy aguda.

Es demorada la preparación del juego ya que todos tienen algo de hiperactividad y no se organizan rápidamente por obvias razones; sin embargo, se nota el esfuerzo y el empeño que todos los participantes hacen para que todo salga bien.

Según un jugador, Óscar Pérez, quien tiene baja visión, todos colaboran con todos y el que pueda ver mejor ayuda a los que no puedan hacerlo.

Minutos antes de que comience el partido los jugadores definen sus puestos y hacen calentamiento. Ese día jugaban tres equipos: los del barrio Castilla, los de Campo Valdés y los del Popular.

Cada uno se divide en dos, el masculino y el femenino. Se juegan partidos intercalados, el equipo perdedor con el ganador, para unos 45 minutos en total como máximo.

Goalball gracias al Inder
Este deporte fue introducido en Medellín por el Inder (Instituto de Deporte y Recreación) que ofrece diferentes actividades deportivas y recreativas a las personas discapacitadas en su proyecto llamado Estilos de Vida: atletismo, baloncesto, fútbol, goalball, boccia, natación, ajedrez y tenis de mesa.

Estos deportes pueden ser de manera competitiva o recreativa, según las capacidades de cada persona, sin importar la edad.

Blanca Cortez o “Blanquita”, como la llaman sus alumnos, a pesar de su dificultad visual, ya ha sido juez en torneos internacionales. Es una de las fundadoras y presidente del Club Delba hace 20 años, creado para ayudar a las personas con discapacidades. Con el Inder trabaja hace 5 años.

Es una mujer segura y con gran talento, habla sin parar y explica todo lo que dice. A pesar de que tiene más de 40 años, tiene tono de voz de niña. Es soltera y aclara: “Creo que soy muy inteligente por no haberme casado”.

Es organizada, lo que se nota en su forma de vestir, ya que mantiene el uniforme impecable, pero también en su forma de caminar, de hablar y en la manera en que organiza y trata a los jugadores. Conoce al derecho y al revés la historia de todos los deportes para discapacitados, sin equivocarse en fechas ni nombres.

“Mi interés por estos deportes me surgió por un accidente que tuve hace algunos años y a raíz de eso entré al Instituto Nacional para Ciegos, que ya no existe, y de ahí con mis compañeros creamos el Club Delba”.

Luego entró a la Escuela Nacional de Deportes y después a la Universidad de Antioquia. Posteriormente ha seguido ayudando en todo lo que puede a las personas con discapacidad visual y asegura que lo seguirá haciendo mientras pueda.

Al este club pertenece Elkin Serna, quien ganó una medalla de plata en los Juegos Paralímpicos de Beijing: “Fue un orgullo para el club y por supuesto para mí”.

Aquella tarde ganó el equipo del Barrio Popular y todos los jugadores se fueron cansados pero muy felices de hacer tenido un rato diferente y de saber que para hacer deporte no hay limitación que valga.

El goalball es el único deporte creado especialmente para personas ciegas o con deficiencia visual.