viernes, 13 de agosto de 2010

Pole dance: entre el erotismo y el fitness

Quienes practican esta actividad no sólo la toman como un ejercicio físico sino como una alternativa de entretenimiento para liberarse de la cotidianidad y pasar un momento agradable.

El pole o vertical dance es una de las actividades físicas revolucionarias del momento. Combina el fitness, la danza y los movimientos más sensuales haciendo acrobacias en un tubo de metal. Un deporte y una habilidad que incorpora movimientos gimnásticos con la belleza del ballet clásico y la danza moderna. Primera entrega


Textos y fotos Camila Mesa Aristizábal y Ana María Pareja Escobar
bitacora@eafit.edu.co

“No hay disculpas, ¡despierten! ¿Quién dijo que solo las sirenas cantan? Puedes ser mujer a cualquier edad, con cualquier molde, silueta, figura, curvas…Llámenlo como quieran, se acabó el prototipo escultural. Todo está en la mente y en el corazón que le pones a tus sueños. ¡Todas podemos niñas, comprobado!”

Eso es lo que le dicen a sus alumnas Zully Osorio y Mónica Sierra, instructoras y pioneras de Pin Up Girls Academy, la primera academia de pole y sexy dance, ubicada en la Loma San Julián, en Medellín, que llegó a principios de 2008 como una opción interesante por ser una práctica diferente, novedosa y útil.

En un principio esta escuela empezó como una práctica entre amigas y se fue difundiendo hasta convertirse en un negocio debido al auge que tuvo.

“Hoy no sólo es un arte sino que se está practicando por cuestiones de moda debido a la envidia y a los vacíos en valores que muchas mujeres de Medellín tienen”, señala Zully.

Mónica comenta que estuvo en Australia capacitándose con dos profesionales de esta pasión. Según ellas, Pin Up Girls respeta las normas del pole dance y está respaldada en el Championship Latinoamérica.

Mónica y Zully se fueron de viaje para Argentina a mediados de 2007. Allí se descubrieron algunas cosas de las mujeres de Medellín:

“Me quedé impresionada de la competencia tan superficial y tan ‘coca’ con que han educado a la mujer paisa, que aparenta ser muy ‘engallada’ por fuera y por dentro tiene los valores por el piso”, señala Mónica Sierra.

Por eso cree que el pole dance podía poner a las mujeres en un punto neutro “en el cual se enfrentan la más ‘pinchada’ y la más ‘ñoña’ hasta llegar a un equilibrio, donde empiezan a crecer como mujeres y como personas”.

Según Zully, “el hombre colombiano es machista y piensa que la mujer tiene que estar encerrada en la casa cuidando a los hijos. Incluso muchos dicen: ¡ay no!, mi mujer que no aprenda eso, ¡qué tal! Mis amigas sí, pero mi novia no”.

También afirma que este país le ha puesto tabú a la seducción y que con el pole dance se puede descubrir la parte de sutil que se tiene sin volverse morbo. Porque el “baile del tubo” se puede hacer de forma acrobática, artística y no sólo para seducir.

Pole dance y sex pole
En Pin Up Girls Academy existen ciertas formas de practicarlo: el pole dance, que entrelaza la acrobacia con el baile, y el sex pole, en la cual no es necesario tener conocimientos previos de este ejercicio, sino simplemente aprender a seducir a la pareja.

La metodología de esta academia se basa en unos esquemas básicos enfocados en el baile, mezclándolos con estiramiento, fortalecimiento y un poco de acrobática para que no se vea muy fitness pues, según Zully, al ser sólo figuras está diseñado para entrenar a las practicantes de los campeonatos y no busca, como ellas, que la mujer se aprenda a querer a sí misma.

Mónica Sierra, comenta que se utiliza todo tipo de música desde que tenga “sabor”: “Hay música fuerte como el regguetón y música suave como el dance hall. A mí me gusta más trabajar con la suave porque aprenden a sacar la parte delicada que tenemos las mujeres, que es lo que queremos que aprendan”.

Ambas afirman que el pole dance despierta en la mujer esa sensualidad que muchas veces no sabe expresar. Por eso a través del baile se aprenden a conocer y a aumentar la autoestima.

¿Los requisitos? Ninguno
No se necesita experiencia ni conocimiento previo para practicar esta sexy y divertida acrobacia: cualquier mujer, no importa la edad, la talla, el peso, pueden realizarla. Existen tres niveles:

Básico, en el cual se acondicionan los músculos y se aprenden las primeras coreografías y acrobacias.

Intermedio, en el que se enseñan movimientos más complejos que requieren de cierta fuerza y resistencia.

Avanzado, donde los giros y posturas son más exigentes y se necesita controlar al máximo abdomen, brazos y piernas.

“Yo no hacía ningún ejercicio y gracias al pole dance adquirí fuerza. Llevo en la academia dos años y medio, pero antes practicaba con una rutina de 4 a 6 horas diarias, hasta que nos empezó a doler todo y empezamos a realizarlo cada ocho días. Ya estoy tan acostumbrada que se volvió natural: es una forma de vida en la parte profesional y personal”, cuenta Mónica.

Se practican diversos tipos de danza vertical, entre los cuales se encuentra el pole o vertical dance, que se caracteriza por ser una técnica deportiva que mezcla el baile con movimientos de gimnasia como la fuerza y el equilibrio.

Los beneficios de esta actividad son muchos: eleva la autoestima, mejora la sensualidad, ayuda a optimizar la coordinación, la flexibilidad y a moldear el cuerpo tonificando los músculos de los brazos, glúteos y abdominales.

Está el cardio-pole dance que es un ejercicio aeróbico, divertido y sin acrobacias que va al ritmo de la música, permitiéndole a la practicante aprender a bailar vertical dance de manera más lenta, pero sexy y divertida.

Y el sexy dance o sexy pole dance, que se basa en aprender pasos básicos como el striptease y coreografías con elementos y accesorios sensuales como la silla, el tuvo y la pared, para realizar y disfrutar en pareja.

Debe hacerse en compañía
Para aprender y entretenerse con esta disciplina es fundamental la práctica, la constancia y un buen acompañamiento por parte de un instructor para no lastimarse. Aunque al principio es complicado, Zully asevera que el cuerpo se acostumbra a los movimientos y estos, con el tiempo, empiezan a fluir solos.

Las personas que lo practican no sólo lo toman como un ejercicio físico sino como una alternativa de entretenimiento para liberarse de la cotidianidad y pasar un momento agradable.

Mónica Moscoso, propietaria de la empresa de mercadeo Mango Maduro y practicante de este baile hace tres meses, considera que es un complemento del bienestar físico puesto que muchas personas se aburren de las rutinas frías del gimnasio y están encontrando en el pole dance una manera divertida de hacer ejercicio bailando mientras se van conociendo el cuerpo.

“Es el complemento de ejercitarte como un todo porque uno queda absolutamente cansado y siente que los músculos sí se trabajan. Además, es comenzar a conocerte, descubrirte y mirar cómo puedes moverte y cogerle confianza a tu cuerpo. Yo lo practico dos veces a la semana, voy a Pin Up Girls los martes y a un evento en la discoteca B–Lounge los jueves”, afirma.

“Debido a que el pole dance es un estilo de vida novedoso y ha tenido tanta acogida quisimos ponerlo más comercial porque de pronto no todo el mundo tiene acceso a pagar una mensualidad. Entonces lo direccionamos al B-Lounge y estamos haciendo una clase grupal en la cual han ido un promedio de 60 mujeres y se les da además de tips, una inducción pequeña sobre cómo hacer pole dance”, comenta Mónica Moscoso, encargada del evento.

También garantiza que ha tratado de que el vertical dance no se vuelva un baile de striptease, sino un complemento de hacer ejercicio de forma sexy para todo tipo de mujeres.

Hoy se ha convertido en una actividad física y sensual presente en cantidad de países, incluyendo Colombia, donde ha reemplazado al pilates reformer, actividad física que une el dinamismo y la fuerza muscular con el control mental, la respiración y la relajación.

“En Australia se practica hace 30 años. Allí hay muchas academias y ya los gimnasios han pasado a un segundo plano debido a que las mujeres surfean y hacen vertical dance”, expresa Zully Osorio.

Alrededor de esta nueva corriente surgen varias posturas. Algunos lo consideran pole fitness, una forma novedosa de ejercicio tanto aeróbico como anaeróbico, en el cual se requiere fuerza y resistencia; otros lo catalogan como un arte escénico, es decir pole art, practicado por acróbatas de circo.

También hay quienes lo asocian con una actividad exclusiva de las stripers, por esto se requiere mucha educación e información para que aquellos que no lo conocen no lo malinterpreten y sepan que es una actividad física y sensual, pero no vulgar.

Ahora hay un dilema porque algunas academias dicen que es un deporte que se podría llevar a los Olímpicos y otras que es un arte, que no tiene que ver con los mismos: un conflicto entre el pole art y el pole fitness.

Existen academias en Medellín que están combinando las dos tendencias, para que esta práctica no sea ni muy sensual ni muy fitness.

A Zully Osorio le gusta aprender y enseñar pole art debido a que involucra más la danza y el arte, ayudando a despertar la sutileza y a buscar la parte femenina de las mujeres, por más acomplejadas, bravas, gordas o flacas que sean. E indica que el pole fitness sólo se limita a la acrobacia.

Pin Up Girls Academy tiene como lema “la experiencia hace al maestro” y por eso resaltan que su metodología se basa en la fluidez y la naturalidad, fortaleciendo el cuerpo y el espíritu.

Zully menciona orgullosa que el objetivo se está logrando: “Las mujeres han dejado de lado esa rivalidad estética que se presenta en la ciudad, donde ha empezado a disminuir la parte de juzgarse a sí mismo y a los demás, por cosas banales que a la final no tienen importancia”.

1 comentario:

  1. Necesito me comunicarme urgente con la persona que hizo este reportaje
    Zuly Ochoa
    311 30 55

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