Ana siguió su vocación y hoy se goza su práctica en Discovery Networks

Ana Vieira inició en julio su práctica académica en este canal internacional y ya logró el mayor reconocimiento para un pasante en la empresa. La estudiante de Comunicación Social de EAFIT comenzó con labores básicas y gracias a su empuje hoy tiene responsabilidades más importantes.

En este video, ella cuenta cómo ha sido la experiencia por la que mereció ser escogida mejor practicante de Discovery Networks.


Por Agencia de Noticias EAFIT
csuarez7@eafit.edu.co

A sus 21 años, Ana Vieira Maya siente que encontró en los niños y en la televisión la mezcla perfecta para ser feliz. Y lo sabe desde mucho antes de que fuera admitida como practicante en Discovery Kids, cadena de Discovery Networks, pues su infancia la pasó entre luces, cámaras y micrófonos de un estudio de grabación.

Por eso, cuando sintió que se acercaba el momento de realizar su práctica como estudiante del pregrado en Comunicación Social de EAFIT, su reto fue ingresar a una empresa en el exterior que le permitiera explorar todas sus ideas.

Se la jugó entonces por Discovery Networks, donde tras cuatro meses de labor fue elegida Top Item en Miami, un reconocimiento que le fue anunciado hace una semana y que será entregado a los cuatro mejores pasantes de la cadena, uno por sucursal.

Así, Ana tendrá un espacio destacado en la página web del canal el próximo 23 de noviembre en el que se contará su historia.“Inicié como cualquier practicante. Las labores los primeros días eran muy básicas, pero con el tiempo empezaron a confiar en mí y poco a poco me han puesto a hacer cosas más importantes, hasta el punto en que hoy ya salen al aire elementos escritos y liderados por mí”, dice la eafitense.

Ana, a quien también se le conoce como Lulú, empezó como la voz de uno de los personajes de Discovery Kids desde Medellín.


Una jornada laboral
Aunque desde que llegó al canal se sintió muy bien y fue fácil adaptarse, nunca olvidará los nervios de la noche anterior a su primer día. Llegó muy puntual a las 10:00 a.m. y en la recepción la recibieron con un bolso de la compañía repleto de regalos y elementos de oficina.

Después de tomarse la fotografía para el carné laboral y conocer al que hoy es su vigilante preferido, el nuevo jefe la llevó a su escritorio y le explicó el funcionamiento de la empresa. Desde ese momento empezó a trabajar tanto que no le ha quedado tiempo siquiera para sentir nostalgia por los suyos. “Sé que es algo temporal y en enero volveré a mi ciudad y a mi universidad”, explica.

Y pese a que su jornada es hasta las 6:00 p.m., no le importa quedarse unas horas más, pues desde que está allá, no ha desaprovechado un minuto de aprendizaje. “Cuando no tengo mucho trabajo me voy para otros canales, pues es muy valioso poder aprender no solo de Discovery Kids sino de toda esta gran familia”, agrega.

Su jornada, entonces, inicia con una revisión de correos electrónicos y de tareas pendientes. Más adelante empieza a escribir guiones y todo el día se la pasa entre editores, diseñadores, salas de audio y grabaciones telefónicas. Así, aprendió esa gran lección que será la base del trabajo para el resto de su vida: “sí es posible entretener y, al mismo tiempo, educar”.

Su vocación

Ana, desde la misma adolescencia, sabía lo que quería de su vida. En esa decisión tuvo que ver bastante lo hecho por sus padres. “Mi papá es fotógrafo y cineasta, mientras que mi mamá dirige una corporación cultural para niños, así que no fue difícil escoger la infancia y lo audiovisual como elemento de trabajo”.

De esa forma, Ana inició como profesora de música y voluntaria en varios proyectos de desarrollo para niños, lo que la enamoró de la labor social. Hace dos años, esta inquietud la llevó a ser la voz principal de Mundi, uno de los personajes principales de Discovery Kids, de manera que semanalmente grababa los comerciales del canal y la voz cantada del pequeño insecto desde Medellín. Ese fue su primer contacto con Discovery Network.

“Me enamoré de toda la familia Discovery Networks e hice todo el proceso de aplicaciones a la práctica, visas, permisos y demás, y aquí estoy feliz de la experiencia que estoy viviendo”, dice.

La estudiante regresará en enero a terminar su último semestre de Comunicación Social y aún no ha decidido si quiere estudiar en el exterior o continuará trabajando.

Y claro, tras estar viviendo un momento tan importante en su carrera, Ana Viera se atreve a darles un consejo a los que, como ella, luchan por sus ideales:

“Nunca recomendaría hacer una práctica solo por cubrir 20 créditos, sino realmente luchársela por hacerla en lo que más les guste. Este es el mejor momento de la vida para aprender dentro de una empresa, para equivocarse y volver a aprender, para preguntarlo todo mil veces, para abrir puertas”.